La Vieille Ferme ha sido popular entre los amantes del vino durante más de 40 años. Producido en una región pacífica y soleada del sur del Ródano, cada color es una expresión de su terruño: el Ventoux aporta elegancia y estructura a los vinos tintos; la altitud del Luberon aporta frescura y finura a los blancos y rosados. La Vieille Ferme está hecha con gran cuidado e integridad por Famille Perrin, propietarios del Chateau de Beaucastel. Los principales críticos de vino de todo el mundo han elogiado a los productores de este vino por su calidad irreprochable, que ha alcanzado el reconocimiento internacional
La Vieille Ferme ha sido popular entre los amantes del vino durante más de 40 años. Producido en una región pacífica y soleada del sur del Ródano, cada color es una expresión de su terruño: el Ventoux aporta elegancia y estructura a los vinos tintos; la altitud del Luberon aporta frescura y finura a los blancos y rosados. La Vieille Ferme está hecha con gran cuidado e integridad por Famille Perrin, propietarios del Chateau de Beaucastel. Los principales críticos de vino de todo el mundo han elogiado a los productores de este vino por su calidad irreprochable, que ha alcanzado el reconocimiento internacional.
La Vieille Ferme ha sido popular entre los amantes del vino durante más de 40 años. Producido en una región pacífica y soleada del sur del Ródano, cada color es una expresión de su terruño: el Ventoux aporta elegancia y estructura a los vinos tintos; la altitud del Luberon aporta frescura y finura a los blancos y rosados. La Vieille Ferme está hecha con gran cuidado e integridad.por Famille Perrin, propietarios del Chateau de Beaucastel. Los principales críticos de vino de todo el mundo han elogiado a los productores de este vino por su calidad irreprochable, que ha alcanzado el reconocimiento internacional.